
Ayer por la noche, escuche una fabula en la radio que me gusto mucho, por eso he decidido ponerla aquí, a mi manera claro.
Un hombre, su perro y su caballo, llevaban mucho tiempo de viaje, tanto que habían perdido la noción del tiempo y el espacio. Y es que a veces cuando nos ocurre algo de forma muy brusca no nos damos cuenta enseguida.
A lo lejos observo el hombre una enorme y preciosa torre blanca de marfil, como estaba sediento, tanto él como sus animales decidió parar y pedir agua.
Al acercarse se encontró con una hermosa puerta vigilada por un hombre elegantemente vestido.
-Buenas tardes caballero,¿me podría indicar donde me hayo, y si podría darme un poco de agua?.-.
-Esto es el cielo, y puedes pasar y saciar tu sed en las fuentes de agua cristalina que posee.-
-Gracias, ahora beberemos mis animales y yo.-.
-No, los animales no pueden entrar en el cielo, ya que son seres de alma impura.- Contesto el guardián de la puerta.
El hombre al oír ésto, monto en su caballo con su perro y continuo su camino sin mirar atrás.
Al rato observo un hermoso bosque con un manantial, y recostado en un árbol un hombre, con decisión se acerco a él.
-Buenas tardes caballero, ¿podría beber un poco de agua?.
-Naturalmente, pase y sacie usted y sus fieles animales su sed.
Una vez que hubieron bebieron agua el hombre perplejo se volvió hacia el hombre de nuevo y le pregunto:
-Buen hombre, ¿donde me encuentro?.-.
-Esto es el cielo.-.
-Pero no puede ser, si pase antes por una hermosa torre blanca y allí me dijeron que era el cielo, ¿como pueden permitir si esto es realmente el cielo, que utilicen y mientan sobre el lugar que es?.-.
-Ah, si aquello es el infierno y en cuanto a permitir que digan que es el cielo, en el fondo nos hacen un gran favor.- Sonrió.
-¿Como puede hacerles un favor?.- Pregunto el hombre asombrado, a lo que el otro le respondió.
-Si, porque de esa forma, aquí solo llegan las personas que no abandonan a sus amigos bajo ninguna circunstancia, como usted que aun teniendo sed no abandono ni a su perro, ni a su caballo.-
CONCLUSIÓN DE LA FABULA, NO ABANDONES A TUS ANIMALES, ELLOS SON TUS MEJORES AMIGOS.
Besos, Tetxu.